Búsqueda de información más allá de Google

En la última clase de Acceso y uso a la información histórica del 11 de octubre aprendimos que los efectos negativos de internet son algunos difíciles de sobrepasar como la brecha digital que se trata de una barrera entre los más jóvenes y los más ancianos que es difícil de separar puesto a que los niños saben manejar mucho mejor las tecnologías que las personas mayores. Otro efecto negativo es la privacidad en la red que en esta podemos encontrar el derecho al olvido (un derecho que todos tenemos para que se borren/no aparezcan tus datos), el derecho ARCO (un derecho a suprimir o rectificar tus datos cuando lo des) o suplantación de perfiles. La seguridad es otro aspecto negativo puesto a que todo lo que acaba en internet de información personal luego puede ser vista por otras personas. U otro ejemplo la Ley SINDE que trata sobre cerrar páginas de contenidos piratas. Pero pese a estas cosas negativas nosotros tenemos la necesidad de informarnos, pero ¿para qué? Pues para construir ciencia, para estudiarla y practicar algunos métodos, hacer revisiones bibliográficas, adquirir más conocimiento sobre algunos campos que no conocemos y para mejorarnos a la hora de buscar información. Para reforzar esta explicación vimos un vídeo sobre la investigación histórica, se trata de un instrumento que recopila datos para reconstruir el pasado de una manera objetiva y exacta. También habla de sus características, métodos (heurístico, hermenéutico y deductivo-inductivo).

A la hora de buscar en internet tenemos dos conceptos que suelen darse habitualmente, el ruido que se da cuando buscamos y encontramos información en exceso, que además no nos sirven para resolver los problemas que tenemos y a veces nos conformamos con dicha información, y la otra palabra es silencio que se da cuando no encontramos nada de lo que estamos buscando.

Cuando buscamos en internet debemos seguir unas fases del proceso de búsqueda, para ello tenemos que definir el problema, hacer una estrategia escogiendo algunos términos, hacerla en inglés para que salgan más resultados, seleccionando una herramienta, definir la estrategia, hacer la búsqueda, evaluar los resultados y elegir y reunir referencias y documentos.

Para la definición del problema debemos saber que si necesitamos más información es un problema que resolver, tener en cuenta para qué necesitamos dicha información, delimitar la temática de la búsqueda realizando consultas orientativas, buscando ayuda o delimitando la necesidad de información. También debemos saber los aspectos relevantes, que tipo de documento buscamos, el idioma en el que lo queremos y el ámbito geográfico y cronológico.

Si queremos escoger los términos de la búsqueda debemos definir una frase resumen, usar varios términos y especificarlos, usar siglas, sinónimos o expresiones, decidir si utilizamos términos específicos o generales, ver si necesitamos utilizar frases completas, no utilizar palabras vacías o genéricas y usar lugares específicos para buscar los términos.

Y el último método a desarrollar es la búsqueda en otro idioma de la misma forma que lo hacemos en español, pero utilizando herramientas que permitan buscar en otro idioma y utilizando diccionarios y bancos de datos.

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